Registro de golpeadores

Por Juan Carlos Martínez

 

Parece una ironía lanzada para burlarse de las mujeres en su día. Es que dicho por funcionarios de este gobierno no puede menos que interpretarse de esa manera. No hay otra forma.

 

Que desde el universo oficial se anuncie un proyecto para registrar a los golpeadores de mujeres es como si el cura Grassi reclamara un catálogo con la nómina de los pedófilos consignando sus datos personales, sus fotografías actualizadas y el pasaporte al infierno firmado por el mismísimo Papa.

 

Ironías aparte, es increíble el nivel de hipocresía de quienes han impulsado la iniciativa oficial y de quienes han adherido a la idea de marcar a fuego a los golpeadores de mujeres mientras comparten el gobierno y el partido del mismo signo con Juan Carlos Tierno, hasta ahora el más famoso de los golpeadores de mujeres que se conoce en La Pampa y sus alrededores desde hace más de treinta años.

 

Tiempo que no le ha sido suficiente al justicialismo pampeano para ponerle freno a un hombre que no sólo es violento con las mujeres sino que extiende su mano dura al resto a la sociedad.
La única manera de darle crédito al proyecto sería si en ese registro de golpeadores se incluyera a Tierno.

 

Por méritos propios le correspondería encabezar la lista.